Tabla de contenido
Tabla de contenido- La importancia de una cadena de suministro alimentario ágil
- La volatilidad del mercado se está intensificando
- Detectar las desviaciones a tiempo
- Gestión por excepción
- Colaboración en toda la cadena de suministro
- Planificación de ventas y operaciones (S&OP)
- Creación de una cadena de suministro resiliente
La cadena de suministro alimentario global se encuentra bajo una enorme presión. El aumento de los costes energéticos, las continuas tensiones geopolíticas, las perturbaciones relacionadas con el clima y la escasez de mano de obra están haciendo que las cadenas de suministro sean más impredecibles que nunca. ¿Cómo pueden las empresas alimentarias responder eficazmente a estos retos? ¿Cómo pueden adaptarse rápidamente a los cambios en la demanda o a las interrupciones repentinas del suministro, manteniendo al mismo tiempo la satisfacción de los clientes y protegiendo los márgenes de beneficio?
La volatilidad del mercado se está intensificando
La industria alimentaria se enfrenta a una volatilidad sin precedentes. El aumento de los precios del combustible, los conflictos geopolíticos y las malas cosechas -vinculadas a los efectos del cambio climático- están ejerciendo presión sobre la disponibilidad y el coste de ingredientes clave como los cereales, los aceites vegetales y los productos lácteos. Los retailers y los proveedores se encuentran en un momento de complejas negociaciones, y los estantes vacíos son un riesgo real en algunos mercados.
El comportamiento de los consumidores añade otra capa de incertidumbre. ¿Los compradores darán prioridad a los productos de alta gama, se pasarán a alternativas más baratas o limitarán su gasto total? Predecir la demanda es cada vez más difícil, pero una cadena de suministro ágil puede ayudar a las empresas a prepararse para cualquier escenario.
Detectar las desviaciones a tiempo
Para una empresa alimentaria, la capacidad de respuesta es esencial. No reaccionar a tiempo ante los cambios en la demanda puede tener graves consecuencias para los márgenes de beneficio. Producir lotes que no satisfacen la demanda real genera costes innecesarios, mientras que las ventas perdidas o los retrasos en las entregas pueden erosionar la confianza de los clientes.
Es importante realizar previsiones precisas de la demanda, pero aún más importante es detectar las desviaciones con antelación. Identificar la posible escasez o cuellos de botella y reaccionar con rapidez mediante operaciones bien coordinadas en la cadena de suministro puede marcar la diferencia.
Gestión por excepción
La visibilidad completa de toda la cadena de suministro, desde el proveedor hasta el cliente final, desde «la granja hasta la mesa», es fundamental para tomar decisiones informadas. Los planificadores deben detectar incluso los problemas aparentemente más insignificantes y evaluar rápidamente su posible impacto en el rendimiento de las entregas. La gestión por excepción permite automatizar las decisiones rutinarias sobre producción y compras. Cuando se produce una desviación, como la falta de disponibilidad de un ingrediente clave, deben saltar las alarmas. Esto permite a los planificadores centrarse desde el primer momento en colaborar con los socios para encontrar soluciones.
Colaboración en toda la cadena de suministro
Una cadena de suministro ágil requiere un seguimiento continuo de los KPI y la capacidad de actuar con rapidez. Si bien es fundamental contar con un software avanzado para la cadena de suministro y planificadores cualificados, la colaboración con los socios -proveedores y clientes- es igualmente importante.
Compartir las previsiones de ventas, los niveles de stock y las necesidades de compra con los proveedores y los clientes fomenta la confianza y la transparencia. Los retailers, por ejemplo, pueden compartir detalles de las próximas promociones o lanzamientos de productos, lo que permite a los proveedores ajustar la producción y garantizar la disponibilidad. Esta colaboración reduce el desperdicio, optimiza los costes y beneficia a toda la cadena.
En el entorno actual de recursos limitados, la colaboración es más importante que nunca. Las empresas deben tomar decisiones difíciles: qué canales de venta priorizar, qué mercados pueden aceptar productos alternativos y qué clientes pueden esperar. La transparencia y la confianza permiten desplegar los recursos -a menudo escasos- de forma óptima, minimizando las molestias para el consumidor final.
Planificación de ventas y operaciones (S&OP)
La capacidad de respuesta comienza a nivel interno, a través de la planificación de ventas y operaciones (S&OP). A través de S&OP, los departamentos se alinean en un plan de ventas agregado para todos los grupos de productos y canales, basado en un único conjunto de cifras. A partir de ahí, se desarrollan los planes de producción y compras y los presupuestos asociados.
Las previsiones rara vez coinciden exactamente con la realidad. El reto consiste en identificar las discrepancias con antelación, analizar sus causas y aplicar las medidas correctivas adecuadas para mantener la capacidad de respuesta operativa.
Creación de una cadena de suministro resiliente
La gestión de una cadena de suministro alimentario hoy en día requiere lidiar con una incertidumbre extrema. Los productores se ven presionados por la escasez de recursos y el aumento de los costes, por un lado, y por los retailers exigentes y los consumidores impredecibles, por otro.
¿Cuáles son los pilares fundamentales para prosperar en este contexto? Visibilidad en toda la cadena, gestión por excepción, asociaciones colaborativas y procesos sólidos de S&OP. En conjunto, estas estrategias proporcionan a las empresas alimentarias la flexibilidad y la capacidad de respuesta que necesitan para, incluso en las circunstancias más difíciles.
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